miércoles, 11 de junio de 2014

Intolerancia a la lactosa


Hola chic@s ^^
Hoy os traigo un post sobre la intolerancia a la lactosa. Se estima que un 40% de los españoles puede llegar a sufrirla.

¿Qué es la lactosa?
La lactosa es un azúcar que está presente en la leche y sus derivados, en muchos preparados comerciales de uso alimentario y en algunos medicamentos.
Algunas personas, después de tomar leche o sus derivados, sienten molestias digestivas, como dolor de vientre, gases o diarrea. Estos son los síntomas más frecuentes que aparecen cuando existe una intolerancia a la lactosa. Esto ocurre porque en el intestino falta una enzima (lactasa) que se encarga de su digestión.
Ante cuadros de gastroenteritis aguda, periodos prolongados de tiempo sin comer, enfermedad celiaca y otras enfermedades del intestino puede aparecer intolerancia a la lactosa.

¿Cuál es su tratamiento?
El tratamiento nutricional consiste en evitar los alimentos que contengan lactosa.
En cualquier caso, es importante conocer el nivel de tolerancia ya que es muy variable en cada situación y también en cada persona.
Es de vital importancia mantener o conseguir un adecuado estado nutricional dando especial importancia al aporte de calcio para asegurar un correcto crecimiento y desarrollo óseo ,sobre todo, en el caso de presentarse en niños y adolescentes.




Recomendaciones nutricionales
·         Muchas personas toleran bien las leches fermentadas, ciertos tipos de quesos y los yogures. Puede que se toleren ciertas cantidades de leche, si se toma acompañada de otros alimentos (pan, cereales o cacao) y se evita tomarla sola.
·         Asegurar la ingesta diaria de al menos tres raciones de alimentos ricos en calcio: leche sin lactosa, yogur o queso (según tolerancia).
·         Aumentar el consumo de pescados que pueda comer con espina (sardinas en lata, anchoas), legumbres, frutos secos, soja y derivados, por su contenido en calcio.
·         Es muy importante leer siempre las etiquetas de los productos preparados, y comprobar si contienen leche, derivados lácteos, suero lácteo, o caseína. Pueden ser mal tolerados.
·         En las farmacias y supermercados se puede encontrar leche, preparados lácteos sin lactosa o con poca lactosa y lactasa.
·         Algunos medicamentos y preparados vitamínicos pueden contener lactosa en pequeñas cantidades, en general se toleran bien.

Como veis, reconociendo bien los alimentos que se toleran, es posible convivir correctamente con esta intolerancia alimentaria.

¡Nos leemos chicos!

Diana

martes, 27 de mayo de 2014

Dieta mediterránea

Hola de nuevo chic@s!!
Hoy os traigo una entrada sobre una filosofía de vida y una de nuestras mejores formas de alimentación.


¿Cómo se creó la dieta mediterránea?
El interés por el estudio de la Dieta Mediterránea surge en los años 50, cuando el profesor y fisiólogo Ancel Keys estudiaba  la incidencia de enfermedades cardiovasculares en diferentes países del mundo.
En este estudio demostró que en la isla de Creta se daban expectativas de mayor longevidad y la tasa de mortalidad cardiaca era tan solo el 10 % de la de EE.UU.
Algunas de las observaciones que Keys hizo sobre los hábitos alimentarios, y los rasgos más sobresalientes de los habitantes de Creta fueron:
·     Aporte bajo de proteínas de primera clase, es decir, bajo consumo de carne y productos lácteos.
·     Consumo preferente de aceite de oliva. Se observó un alto consumo de este tipo de grasa que suponía un alto aporte calórico de origen lipídico, superior al 40 %  de las calorías totales al día.
   Aporte rico en glúcidos, principalmente procedentes de cereales, frutas, verduras y hortalizas frescas y, por tanto, una dieta rica en fibra, vitaminas y minerales.
·       Consumo de vino acompañando las principales comidas, y actividad física no despreciable, ya que la mayoría de la población era eminentemente agrícola.
 
Desde este momento se proclamó la alimentación mediterránea como modelo a seguir en medicina preventiva, y es considerada actualmente una de las mejores dietas como promotora de salud y fuente de bienestar.

¿Qué características tiene?
Los alimentos o nutrientes que nos aporta dicha dieta, y que determinan su valor son los siguientes:
·         Gran aporte de cereales, legumbres, frutas, verduras y hortalizas.
·         Consumir pescado habitualmente.
·      Utilizar grasas saludables como el aceite de oliva y pescados azules que son una buena fuente de ácidos grasos Omega 6 y Omega 3.
·  Bajo contenido en grasas saturadas y proteínas de origen animal, reduciendo al mínimo el consumo de carne roja.
·         Como fuente de hidratación el agua y en las comidas, el vino.
·      Utilización de técnicas culinarias sencillas, utilizando productos frescos, de temporada y poco procesados.
·   Usar la fruta fresca como postre habitual reservando los dulces a ocasiones especiales.
·  Llevar una vida activa realizando ejercicio físico diariamente para contribuir a mantener un peso adecuado.


¿Qué beneficios nos aporta? 
La fibra procedente de cereales, leguminosas, frutas y verduras tiene un efecto beneficioso favoreciendo el tránsito intestinal; y en general contribuye a equilibrar el perfil calórico de la dieta.
·     Las vitaminas y minerales destacan por su función antioxidante en la lucha contra los radicales libres y sustancias tóxicas. Además se relacionan con un menor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer.
·     El aceite de oliva, el pescado azul y los frutos secos reducen el nivel de colesterol, previniendo el riesgo cardiovascular.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que entre el 30 y 40 por ciento de los cánceres podrían prevenirse con medidas relacionadas con la dieta, el control del peso y la actividad física.

Incluir la dieta mediterránea en nuestra vida nos ayuda a recuperar la alimentación que tuvieron nuestros padres y abuelos generaciones atrás y además nos aporta numerosos beneficios.

¿A qué esperas para seguirla?

Besitos para todos       

Diana